En áreas donde la remoción de agua no es una opción, los peligros de resbalones aumentan diez veces. Para prevenir lesiones, es crucial tomar seriamente en consideración medidas para evitar que visitantes, empleados e incluso uno mismo corran el riesgo de sufrir resbalones y caídas.
En 2013, se estima que 646,000 trabajadores tuvieron un accidente en el trabajo, y más de un tercio de estos accidentes resultaron en lesiones que causaron más de 3 días de ausencia en el trabajo, con aproximadamente ¾ de ellos causando una ausencia de más de una semana. En la industria de alimentos y bebidas, los resbalones representan aproximadamente el 80% de las lesiones reportadas al HSE, y el 90% de estas lesiones son el resultado de superficies mojadas o contaminadas.
Áreas como piscinas, botes, restaurantes, parques acuáticos y supermercados son solo algunos ejemplos de entornos donde la exposición al agua es común. Aunque mantener las áreas de paso limpias y secas es crucial para la seguridad, no siempre es suficiente. Además, mantener las áreas limpias y secas es esencial para prevenir el crecimiento de algas y hongos, que pueden hacer que una superficie sea aún más peligrosa.
Incluso si optas por pisos texturizados para áreas constantemente húmedas, algunos de estos pueden no ser tan efectivos como se cree inicialmente, lo que resulta en superficies que aún representan riesgos de resbalones.
Es aquí donde la cinta antideslizante puede ser un complemento efectivo para tus medidas de prevención de resbalones. Con la capacidad de aplicarse en cualquier superficie que requiera refuerzo, la cinta antideslizante no abrasiva es una solución ideal para áreas húmedas. Su superficie delgada es perfectamente adecuada para caminar descalzo, por lo que es ideal para su uso en piscinas, duchas, parques acuáticos, etc.
La cinta antideslizante no dañará los pies descalzos debido a su construcción en PVC gofrado que, una vez terminado, tiene un tacto más suave. Aunque aún ofrece la textura necesaria para prevenir resbalones, carece de los minerales afilados que podrían causar daños en la piel o la ropa.
Además, las cintas antideslizantes no abrasivas, al no tener valles en el material, son adecuadas para áreas con estrictos estándares de higiene. Esto significa que las bacterias no pueden alojarse en la superficie, lo que las hace fáciles de limpiar y mantener.
La aplicación es tan simple como quitar el revestimiento de respaldo y aplicarlo sobre una superficie limpia, seca y libre de grasa. Una vez aplicada, la cinta antideslizante está lista para usar de inmediato.
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